sábado, junio 24, 2006

¿Experimentamos...?




¡Qué locura! ¡Qué desenfreno!¡Euforia total!
Quisiera ser un pulpo para poder utilizar mis ocho manos llenas de lápices de colores.
Coloreo y coloreo sin parar, sin medida. Todo se me olvida. El tiempo corre y no me entero. Los colores me atacan por todas partes, sin tregua. Es una batalla campal. La lucha sigue y sigue sin parar...y no consigo vencer.
Poco a poco me voy relajando. LLega el sosiego. El espíritu se serena. Los colores se convierten en formas insinuantes. Ya no hay ataques, ahora sugieren, potencian la creación. Como quisiera ser un Leonardo, un Goya...Las ideas fluyen sin fin...Voy de un lado a otro, pienso en ésto luego en lo otro...Aquello que me parecía tan complicado de solucionar ya no me lo parece tanto...
¿Qué son los mandalas? ¿Por qué me está ocurriendo todo esto?
Es hora de investigar un poco.
Mandala. Significa simplemente círculo, es la suma de todos los puntos, la reconciliación de los extremos, el uno y el todo, principio y fin. Aunque este término proviene de la India, su significado, su filosofía, está en todas las culturas bajo diferentes nombres: círculo, rueda, corona, rotación, circulación, corro o baile. Incluso laberinto.
Pura simbología: en las formas, en los colores, en los números.
Desde el principio de los tiempos ha formado parte de todas las culturas, de oriente a occidente. Y el arte está lleno de ejemplos.